jueves, 26 de junio de 2014

ANA MARÍA SERRA/ MONÓLOGO DE UN ENSUEÑO

sueño en mi ensueño
con hombrecitos blancos y negros
que giran en un bailoteo sin sentido sobre mi frente

sueño en un ensueño que  muda en pesadilla
los hombrecitos blancos tuercen su boca en una mueca
de pretendida sonrisa
y extienden sus cuatro extremidades
para marcar el compás de la ronda danzante
en tanto los hombrecitos negros
mortificados
se inclinan en actitud simiesca
y mi cabeza da vueltas en mi ensueño

el hombrecito negro que encabeza su especie
toma la mano del primer blanco
y  el resto va colándose poco a poco entre los intersticios
de los cuerpos
hasta fundirse  en mi sueño

como el ying y el yang se integran

y así me despierto

jueves, 19 de junio de 2014

ANA MARÍA SERRA/ CONSEJOS PARA UN DÍA DE LLUVIA


es indispensable que tu casa tenga un techo de chapa
así  -si tu oído no es muy fino-
podrás detectar con rapidez que afuera llueve
también es importante que haya un ventanal
que dé –con preferencia- a un jardín o parque

en su defecto
si vivís en la urbe tumultuosa
el paisaje que verás ya no será “paisaje”
aunque podrás gozarlo
si sabés abrir bien tus ojos y penetrar en el mojado panorama

cuando las gotas gordas
(esas que caen y se aplastan como pájaros heridos contra el techo)
dejan paso a las bailarinas de ballet –las finitas-
(monótona danza de ninfas a la hora de la siesta)
todo se habrá vuelto más brillante y colorido

y si un relámpago se cuela por entre el gris telón de la lluvia
los reflejos de las flores y las plantas
abrirán la puerta de tu fantasía
y formarás parte de la naturaleza

podrás mezclarte entre la gente que corre  guarecerse
con un paraguas floreado o con lunares
tal vez la gente te empuje o quiera meterse bajo tu resguardo

si no podés abrir el paraguas
o si un cordón de tus zapatillas se desató y te incita a la caída
eso ya  es otra historia.
























lunes, 16 de junio de 2014

ANA MARÍA SERRA/ "SIN SALIDA"


me apoderé
de tu sonrisa aquella noche
cuando abrí mi puerta equivocada

los encuentros furtivos
caminaron por pasillos sin salida
y un ambiguo túnel
ocultó la incontrolable pasión

no más –dijiste-
no me busques –respondí-
en un tira y afloje
enfrentamos rutina y transgresión
te abandoné para encontrar los brazos
del cobijo que enjugó mis lágrimas

mañana o quizá en unos días

responderé a tu llamado
 
                                        

                                                En:Cantos de Sirena