domingo, 14 de diciembre de 2014

WILLIAM SHAKESPEARE: MÍNIMOS APUNTES SOBRE UN GRANDE DE LA LITERATURA

Sobre el teatro

Grandes tragedias tales como MacbethOteloHamlet y El rey Lear son reflejos del mundo renacentista, en el que alborea la sensibilidad moderna: Dios deja de ser el centro del mundo, y cobra total importancia la presencia del Hombre. En consecuencia, aparecen temas como la duda frente a la identidad, la vejez, la traición, la ambición; la percepción del mal se muestra como parte de la esencia humana.
Pero estas características del teatro de Shakeapeare no representan por sí solas su calidad única; sucede que esos caracteres y esos conflictos surgen de una capacidad ilimitada para moldear la palabra en todos los planos. El gran dramaturgo inglés eliminó todas las fronteras: bufones y reyes comparten el mismo rango de problemático diseño, de contradictoria y rica existencia social, verbal y moral. Por eso serán Falstaff, el gordo bufón y soldado presente en varias obras, junto con el viejo rey Lear, dos de los puntos extremos del arco de sus caracteres. En términos generales, lo sublime de las obras de Shakespeare es el retrato personajes delimitados con precisión matemática, de tal manera que esa misma ambigüedad colma su carácter de una extraordinaria riqueza de matices. Por medio de la fuerza del lenguaje, los tipos shakesperianos manifiestan las profundidades de su espíritu y se declaran individuos libres, capaces de elegir su propio destino. En este sentido, su obra es tan moderna y está tan abierta a distintas interpretaciones como El Quijote de Cervantes.
 

Borges y Shakespeare
Borges dedicó cuentos, poemas y ensayos a Shakespeare, interesándose no sólo en distintos aspectos de su obra –por ejemplo, su transgresión a la regla de las unidades espaciales y temporales en las representaciones teatrales o el análisis de Macbeth– sino también observando la curiosidad biográfica “de que un hombre mediocre, oscuro, de quien poco se sabe, llegue a ser uno de los escritores más renombrados”.
El tema permanente en las obras de Borges, al igual que en las de Shakespeare, es lo transitorio de la vida y la vanidad de la gloria

*"A Shakespeare Anthology”, reseña bibliográfica aparecida en la revista “Sur”  (n° 62 de noviembre de 1939) y recogida en Borges en “Sur”. 1931-1980 (Buenos Aires, Emecé, 1999).

*“Everything and nothing.En: El hacedor (1960)

*“Página sobre Shakespeare”, ensayo aparecido en la revista Sur (n° 289-290, julio-octubre de 1964, dedicado a Shakespeare) y recogido en Borges en “Sur”, 1931-1980, ya citado.

*“Tema del traidor y del héroe”, publicado en revista “Sur” (n° 112, de febrero de 1944) y recogido en Ficciones (1944).

*“Shakespeare y las unidades”, ensayo publicado en la revista “Cuadernos” (n° 87, agosto de 1964) y recogido en Textos recobrados, 1956-1986 (Emecé Editores, Buenos Aires, 2003).

*“El teatro”, comentario sobre Macbeth, Hamlet y Romeo y Julieta incluido en Introducción a la literatura inglesa (en colaboración con María Esther Vázquez, 1965).

*“Macbeth”, poema de cuatro versos incluido en la sección “Trece monedas”, de El oro de los tigres (1972).

*“Prólogo” a Macbeth, publicado por Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1970 y luego recogido  en Prólogos con un prólogo de prólogos (1975).

*“La memoria de Shakespeare”, cuento publicado en el diario “Clarín”  el 15 de mayo de 1980 y luego recogido junto a otros tres relatos en el libro La memoria de Shakespeare (1983).





Club de Lectura "Modelo para armar"

Este año nos sumamos a la conmemoración del 450° aniversario del nacimiento del gran dramaturgo inglés con una charla que dimos en la Librería "Los Siete Locos"  y a la que denominamos: "Shakespeare en Mar de Ajó"
En un clima cordial y con intervención del público participante, pudimos brindar así nuestro homenaje, con el cual finalizamos las actividades del año 2014.-


domingo, 7 de diciembre de 2014

ANA MARÍA SERRA/ "INFIDELIDAD"

                          
Un hombre decide engañar a su esposa. Se justifica a sí mismo pensando en que han pasado muchos años y la relación se ha desgastado. Muchas veces se sorprende junto a su mujer sin tener nada qué decir, y cree que a ella la incomodan los silencios.
La tecnología ha venido en su ayuda: conoce por internet a una mujer joven, atractiva. Se encuentra con ella personalmente y al poco tiempo se convierten en amantes. Pasan algunos meses y el hombre se aburre de esta nueva relación. Encima, comienzan a asaltarlo los remordimientos. En ocasiones cree percibir un destello en los ojos verdes de su mujer, un gesto de espera o de abordaje. Piensa “ella lo sospecha”, y entonces abandona a su amante.
                   
Ahora está sentado en el banco de una plaza, tratando de poner en orden sus pensamientos. La duda lo asalta, ¿deberá o no confesarle a su mujer que le ha sido infiel? Mientras reflexiona, su mirada recae sobre una pareja sentada en un banco lejano. Están abrazados amorosamente, y la mujer pasa sus dedos por el cabellos del amante.
“Tal vez, con un poco de buena voluntad, podríamos volver a lo que fuimos, recuperar los gestos mínimos de la pasión, como esa pareja”.
Se levanta convencido de que va a tener que mantener una larga conversación con su mujer, la más importante de sus vidas.

El hombre llega a su casa. Cuando abre la puerta, su esposa está en la sala, esperándolo. Solamente le basta atisbar al otro hombre que está sentado en el sillón y percibir el destello en los ojos verdes de su mujer, para comprender que ese gesto de abordaje ahora ya es inútil.
                                            

                          En La trama engañosa (2011)